miércoles, 14 de octubre de 2009
Quisiera ser
Quisiera ser esa belleza lánguida de un cuadro de John Waterhouse. Largas guedejas rubias, trenzadas, piel de alabastro, corona ciñendo mis sienes, Lancelot a mis pies, roto de amor.
Quisiera ser esa chavala canija, de ojos grandes, labios gruesos, esa cualquiera que enamora, protagonista de amores imposibles, objeto de pasión.
Quisiera ser la rubia recauchutada, perfecta, tetona, culona, estupenda, flotante y plástica, vestida de leopardo, tu esclava sexual.
Quisiera ser la hermosa geisha, sumisa, de nuca cálida y mórbido antebrazo, de mirada fina, avergonzada e impúdica, de trato amable, suaves modos, y dedos ágiles.
Quisiera ser la elegante dama, que pisa las mullidas alfombras de un enorme palacio, descalza, silenciosa, con la oscuridad en sus ojos y en sus cabellos, y la frialdad en la piel.
Quisiera ser la protagonista de tus sueños, lejana, intocable, inalcanzable.
Pero soy como soy. Aspirar a más, es fábula.
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tu eres mucho mas que todo eso amic!
ResponderEliminarQuizás y sólo quizás no seas todas esas cosas, pero eres otras, mucho más importantes, mejores por supuesto.
ResponderEliminarInalcanzable para muchos y muchas, eres selectiva con tu entorno y transparente ante lo que te desagrada. Eres una gran amiga, una gran persona, estupenda consejera, inteligente, culta, trabajadora,...
En el ámbito "zezuá" y de pareja no sé, en el de la amistad, para quien te alcanza, te tiene cerca y te toca, eres de esos tesoros que no quieres perder.
Me extraña mucho leer esto, tú eres más importante que esa superficialidad que muchos buscan hoy y que cultivan, olvidando lo más importante, lo de dentro. Lo de fuera es perecedero, no es vital.
Eres lo que eres, que es muy bueno y muy bonito también, y es genial.